La andropausia, es el proceso por el cual las capacidades sexuales del hombre disminuyen con la edad al igual que otras funciones orgánicas, resultado de los bajos niveles de testosterona en el organismo, o bien por el mal funcionamiento de los receptores de testosterona.
Al igual que la mujer tiene su climaterio (la menopausia) por el cual no puede tener más descendencia, el hombre va perdiendo potencia sexual, pero sin ciclos tan marcados ni pérdidas tan significativas. La actividad sexual del hombre no está marcada por períodos regulares como en el caso de la mujer, pudiendo tener hijos en cualquier momento por la producción de espermatozoides. Tampoco presenta un punto límite preciso. Un hombre puede tener la capacidad de procrear hasta muy avanzada edad. En algunos hombres esta función puede mantenerse hasta pasados los 70 años e incluso no perderse con el tiempo, dependiendo de cada caso.
Además de la disminución natural de los niveles de testosterona debida a la edad, puede producirse en los varones que han sufrido una orquidectomía (p.e. por causa de un cáncer de testículo). Aun cuando un solo testículo es normalmente suficiente para mantener los niveles normales de testosterona, alrededor de un 10% de estos pacientes presentan niveles disminuidos. Y obviamente ocurre en el 100% de los varones que pierden ambos testículos.
En muchos casos los hombres no se dan cuenta de su estado pero es obvio que ese nivel de testosterona está disminuyendo a nivel del transcurrir del tiempo ya que los síntomas se pueden asociar a estados normales de estrés. El hecho no es tan común como el de la mujer pero es allí en donde el hombre experimenta una disminución en su potencia sexual.